El bonsái: Le dan mucho más valor al núcleo familiar, el objetivo de su emprendimiento es para sostener a la familia. El roble: Estructurados, meticulosos, organizados pero les cuesta arriesgarse. El bambú: Flexibles, son los emprendedores que aunque pierden dinero tienen la capacidad de adaptarse (resiliencia). El dinero es visto como diversión y entretenimiento, un elemento que fluye y está en movimiento constante. El cactus: Nobles, crean fundaciones, utilizan el dinero para ayudar a otros
